Al lado de un almacén construido con chapa y abierto de par en par, podéis ver varias cajas con el logo de la agencia junto a una exuberante vegetación. De pie, sobre un escenario improvisado, veis a un grupo de personas formado exclusivamente por miembros de la Agencia.
Todas las miradas están fijas en vosotros.
La multitud está en silencio. Si no fuera por el susurrar del viento, se podría escuchar el vuelo de una mosca.
Visiblemente ansiosa, Tess Heiden toma la palabra y se dirige a los supervivientes de la Agencia T.I.M.E:
Con el fin de potenciar la interpretación, pasad el dispositivo al jugador que controle a Tess para que pueda leer el siguiente texto en voz alta Si nadie ha escogido a Tess, cualquier jugador lee el texto.
«¡Hola agentes! Tal y como acordamos, ha llegado el momento de evaluar el estado de nuestras operaciones desde que tuvimos que abandonar apresuradamente nuestra antigua Agencia.
Iré directa al grano: en la evaluación hay un poco de todo y me genera cierta incertidumbre con respecto al futuro. Aunque en términos generales nuestras misiones para evitar nuevas disrupciones en la línea temporal han ido bastante bien, nuestros esfuerzos para conseguir reclutas no han funcionado del todo. Andamos cortos de personal y es crucial solucionar este aspecto.
Además, parece que las malas costumbres están arraigando. Si bien es cierto que fuimos entrenados para tareas específicas, es necesario que empecemos a salir de nuestro nicho. ¿O acaso creéis que la comida empaquetada crece en los árboles? ¿Que el agua potable aparece por arte de magia en nuestros depósitos? ¿Que la gelatina verde que rodea la isla expulsa misteriosamente suministros médicos? Es vital que cada uno de vosotros tome parte en el esfuerzo común para evitar que la Agencia se convierta en un pozo de iniquidad.
Una última cosa. Sí, es cierto que el Azrak se obtiene de la gelatina verde gracias a un proceso creado originalmente por los syaans. Soy consciente de que para los más veteranos de vosotros debe de ser difícil confiar en una sustancia como esa, sabiendo que su creación se basa en los conocimientos de una gente que hasta hace poco considerábamos enemigos. ¡Pero no debemos olvidar que si seguimos vivos es también gracias a los syaans!
Así que, olvidad vuestras viejas costumbres, vuestras antiguas enemistades y vuestras creencias desfasadas. Debemos adaptarnos a este nuevo sistema, a esta nueva forma de vivir. No hay elección, debemos permanecer juntos. Entrenar y desarrollar vuestras habilidades personales como agentes es genial. Pero dedicar vuestro tiempo y esfuerzo a la Agencia y a los otros es fundamental. No olvidéis nunca que los elois están ahí fuera, esperando a que cometamos un error. Y cuando lo hagamos, nos encontrarán y nos aniquilarán. ¡No os desaniméis! ¡Permanezcamos juntos y saldremos victoriosos!»
Tess calla, con el corazón retumbando dentro del pecho y los puños cerrados con fuerza. Muchos enmudecen al ver tanta determinación. Pero, a través de la multitud silenciosa, se abren paso varios vítores de apoyo a los que sigue una erupción de aplausos.